jueves, 20 de agosto de 2009

Mi regalo de cumpleaños y Navidad

Hace mucho tiempo que quiero un auto. En realidad, creo que siempre lo quise y no me lo compré por desidia. En alguna ocasión, incluso tenía el dinero en el banco, tomé clases de conducción y no lo compré. A eso me refieron con desidia. Pero el año pasado me lo prometí a mi misma. Y en un almuerzo dije voy a comprar un auto. A los chicos les brillaron los ojos, pero no tardaron los reclamos del Caballero y de la Tuty que me decían la prioridad es tener una casa. Un auto es un gasto. No lo necesitamos, hay otras cosas más urgentes. Los argumentos llegaron a su fin cuando, muy seria, espeté: Les estoy informando que voy a comprarme un auto. Conjugación en primera persona, o sea, un auto para .
El año pasado me cobró cara la altanería, cuando los ladrones invadieron mi casa. Pero me la devolverá en este último trimestre, cuando, encaramada en él y escuchando mi musiquita a todo volumen, me vean circular por la ciudad en esto:


Ya tengo las gafas de sol que completarán el look. Buenas tardes.

No hay comentarios: