martes, 30 de octubre de 2007

Constituyente Q.E.P.D.

Una Nava, el otro Cava. En las Costas Podemos, con nuestro Marinkovic, dijeron y bueno, ahí está.
Sus manos preparan el estuco que pondrán en la sepultura.
Constituyente: Q.E.P.D.

Los bolivianos estamos de duelo. Algunos lo sentimos más que otros. "Pero si ayer no más yo marché por ella", decimos algunos, consternados.
"La secuestraron, la maltrataron y, finalmente, la mandaron a Oruro", dicen los periodistas de crónica roja, paradójicamente, los únicos que informan la verdad en este tema.
"Tan bonita, tan chiquita", cantan los villeros, en medio de llantos embriagados.
"Yo no fui", responden los de la vista gorda, en un karaoke cruceño.
Mente afiebrada por el dolor. No hay espacio para la resignación.
Los minutos pasan, y no hay señales de recuperación.
Existe un equipo de médicos residentes, inexpertos, dándole respiración artificial en la sala de terapia intensiva de la Vicepresidencia.
Afuera estamos unos cuantos, que nos resistimos a vestirnos de negro. Quizá si le damos nuestro apoyo, si salimos a las calles a demandar que siga viviendo, se recupere del coma.
No, mejor no. Mejor recurrimos a la medicina tradicional.
Compañeros indígenas, los necesitamos, sólo ustedes podrán otorgar el aliento de vida necesario a esta niña.

3 comentarios:

la de la casa nueva dijo...

Que pena, se nos muere, y tantas esperanzas se van con ella...
Un abrazo querida amiga, que te encuentre bien y radiante, solo por hoy, si?

Anónimo dijo...

NO siempre, que no se nos muera, para nada, porque sino: de qué sirvió la caminata de los indígenas de las tierras bajas a inicios de los 90?
Desde ese entonces hemos esperado que el país funcione reconociendo a toditos, no sólo a unos cuantitos y ahora que se está por dar, con flamante presi, no sería justo para nadie.
Es obvio que quienes ya sabemos la quieren enterrar, pero no siempre. Quienes deben ser enterrados (y ni así yo les llevaría mis tantawawas para que hacercelo rezar en pleno Todos Santos) son los partidos políticos de siempre y otros "muertos" que siguen deambulando como zombies por las calles de La Paz, cerquita del congreso, en guaridas prefecturales y lastimosamente en Sucre.

Saludos mi estimada Dani, en La Época siempre te recordamos, (la anterior me choqué con tu sr. esposo en Liberación, qué mala experiencia no?) dejaste una buena huella y espero algún día se nos crucen los caminos de nuevo (parece que será pronto jejeje luego te cuento).
Cómo vas de salud?

Richard Sánchez

Daniela Otero dijo...

La de la csa nueva; Qué bueno encontrarte de nuevo, ya te extrañaba! Bueno, todavía vive, aunque moribunda, veremos qué pasa y seguramente lo comentaremos.
Richard! Qué alegría que me hayas escrito, en una anterior entrada, la de Piero, comenté sobre ti, y si leíste el artículo o lo leerás te darás cuenta de que tú también dejaste una buena huella. Estamos en contacto.