martes, 16 de diciembre de 2008

¡Me robaron otra vez!


"Otro año perdido y sin certidumbre. Se va un año que huele a frustración, doce meses en los que han reinado más las dudas y el miedo al futuro, que la certidumbre que la gente esperaba. Otro año más de oportunidades perdidas".

Es que dan ganas de llorar. Dónde habrán recogido los periodistas de La Razón las percepciones para hacer su Anuario ¿no? ¿En el espejo?
Porque en lo que a mí respecta, este año ha sido de recomposición. Doce meses en los que la mayoría de este país ha ratificado su voluntad de cambio una y otra vez, en las urnas. Y de certidumbre. Certidumbre de que el proceso de cambio es un camino sin retorno. De que, a pesar de la dolorosa masacre de nuestros hermanos en Pando, el país tendrá una nueva Constitución Política y de que además, quienes cometen actos delincuenciales, como tomar empresas estatales, destrozar nuestro patrimonio, volar gasoductos, apalear señoras de pollera, cometer actos de racismo, tendrán que poner las barbas en remojo, porque podrían ir presos y terminar llorando, como el cívico tarijeño Reynaldo Bayard; o fugados, como el pícaro Branco y su compinche Ana Melena.

Como no pudieron darle el honor al Cardenal de la vista gorda, los periodistas de La Razón le dan el personaje del año a Los Kjarkas. A mí me encantan, pero tanta originalidad me conmueve, por diorrrr.

Es que para los periodistas de La Razón, la multitudinaria marcha de indígenas y campesinos, en la que más de 200 mil personas exigieron la convocatoria al Referéndum Constitucional no existió. Fue otra más de las marchas fantasma que organiza el Evo. En realidad, la bola de cristal con la que miran la realidad, les mostró que Tuto, ja! Nada menos que el más incapaz de los opositores, "devolvió la paz a Bolivia y le dio “el empujón final al Referéndum Constitucional".

Pero no sólo eso, no, en el país de la incertidumbre en el que viven los periodistas de La Razón, "las regiones de oposición salieron fortalecidas en cinco de los seis procesos electorales realizados". Sólo en el sexto –olvidan decir que era el más importante porque era nacional y no regional, y que además era el que cuenta al final de cuentas y que valga la redundancia- el gobierno recibió un fuerte respaldo.

Y la matanza en Pando no es un hecho repudiable para los periodistas de La Razón, que en las primeras 18 páginas nos llenaron de sus interpretaciones de brujos chapuceros y que, en este caso, sólo se limitan a una pobre crónica que titula "Tras la matanza, la oposición regional -sí, la misma que se había fortalecido en CINCO procesos electorales- salió herida de muerte".

"El Revocatorio fortaleció a Evo y debilitó a la oposición". ¡Oh descubrimiento! ¡El periodista que escribió esto terminó desmayado! Miren ustedes:

"Como si se tratara de una jugada maestra de ajedrez para dar el jaque mate a Evo Morales, los senadores opositores aprobaron el 8 de mayo el proyecto de ley del referéndum", dice el autor, para después afirmar: "la apuesta opositora fue planeada después de dos días del cumpleaños de Tuto, 7 de mayo, pensando que con la victoria de los autonomistas el 4 de mayo, Evo iba a vetar su propia Ley, pero el efecto fue contrario, Evo fue ratificado con el 67,4 por ciento". ¡Qué poética manera de analizar la política! Sólo dos días, dos y nada más que dos días después del cumpleaños de Tuto. ¡Quién lo hubiera dicho, si tan felices le cantamos el japi verdey a nuestro jefe!…Oh país ingrato, ¿por qué me das a beber este cáliz?

Y remata el desvencijado columnista de La Razón, Ricardo Paz:
"Evo no podía dormir... y como hacía siempre en circunstancias difíciles se encomendó a los espíritus de sus padres. La invocación tuvo en efecto increíble. Al día siguiente, los senadores opositores parecían poseídos y aprobaron la convocatoria a referéndum...El tiempo ratificó, por enésima vez, que son los espíritus y no las fuerzas terrenales, los que gobiernan a los hombres y a la política".

¡Qué tal esa! ¿Qué fumaste Ricardo, qué fumaste? ¡Yo también quiero!
Después entramos al tema picante:
"Evo ataca a Estados Unidos. Sacó a Goldberg, a USAID y a la DEA y ni siquiera quiso escuchar a dos enviados de Bush que este año intentaron limar asperezas. El Presidente está convencido de que la embajada de Estados Unidos conspiró, financió y apoyó un golpe de Estado cívico prefectural. Pero sus pruebas son correos electrónicos y recortes de prensa", dicen los periodistas de La Razón. Claro, ni siquiera se molestaron en investigar el origen del armamento utilizado por las logias y se hicieron los de la vista gorda frente a las reuniones del embajador con los cívicos y prefectos golpistas.

La antológica serie de artículos sobre la inflación es el sumun del prejuicio y la mala intención de estos dignos periodistas:
"La ola de la crisis llega y halla desprevenida a la economía; La inflación para las amas de casa fue de al menos 35 por ciento; Segundina Ríos recibía 100 dólares mensuales de su hijo mayor que vive en España… antes ese monto eran 800 bolivianos, ahora son sólo 700 y gasta el doble en el mercado".
Pobre Segundina, no le alcanza, la inflación la obligó a mandar a otro de sus hijos a trabajar de voceador de minibús.

Ni una palabra sobre la especulación de ganaderos, pícaros aceiteros, polleros, lecheros, nada.
El anuario continúa con titulares como éstos:
"La ideología se impone y afecta al comercio exterior; la escasez de combustible se controla en base al miedo; los recursos del IDH aún se mantienen como un misterio; las FFAA conquistan cuotas de poder en el gobierno de Evo; el gobierno desinfla las demandas de Chuquisaca y la divide; cuando la Ley se convierte en una piedra en el zapato"...
Un rosario de líricas afirmaciones, extraídas del extraño tarot con el que estos periodistas leen la realidad boliviana.

Mutis estricto sobre el crecimiento de las reservas internacionales; ni una frase sobre el superávit fiscal; nada sobre la Nacionalización de los hidrocarburos; ENTEL sigue siendo de los italianos. Como depende de ellos, no hay ni habrá nueva Constitución Política del Estado.

Segundina tiene abuelita que recibe Renta Dignidad y también hijos que reciben Bono Juancito Pinto, pero eso no les importa a los esotéricos periodistas, que lo resumen todo en un articulito, ínfimo, en el que ponen todas las acciones del gobierno en beneficio de la gente.
Si pusiéramos todo en una balanza, la cobertura hacia la oposición agujerearía el piso.

Con siete fumadas poderosas, la autoconcebida élite periodística de este país, continúa dando respiración artificial a sus cadavéricos analistas. Ahí están el vendido y desconocido Marcial Fabricano; Manfredo Kempff; Víctor Hugo Cárdenas; Jorge Lazarte; Winston Estremadoiro; Humberto Vacaflor. Hasta Javier Torrez Goitia! Sí, el mismo que defendió a Goni y cavó su propia sepultura el año 2003!

El broche de oro: dos páginas de fotos de este gran equipo de chamanes, perdón, de periodistas.
"Todos ellos cultivan el desafío de la excelencia, por un mejor periódico cada día y pensando en el país".

Basura pura. Y yo que acostumbro comprar anuario para recortar y pegar en mi cuaderno los hechos más importantes del año, para que mis hijos se enteren cuando sean grandes. Pero este anuario no sirve ni para envolver llauchas ¿Me lo cambiarán por papel higiénico los revendedores de papel? Hmmm, acabo de darme cuenta de que me hicieron el cuento del tío.

3 comentarios:

La Vero Vero dijo...

neeeeeeeeeeeeeeeee, me estás contando...

Daniela Otero dijo...

¿¿??

La Vero Vero dijo...

jajajaja que ya rayan en lo increíble pues. EN LO INCREÍBLE.